GEMÄLDEGALERIE, Miraflores Weyden
El Tríptico de Miraflores es uno de los retablos más famosos del maestro flamenco Rogier van der Weyden. Lo realizó entre 1422 y 1445 para Juan II de Castilla y, tras su muerte, se donó a la cartuja de Miraflores en España, de la que toma su nombre.
El tríptico es un óleo dividido en tres tablas que miden 71x43 cm cada una, encastradas en un marco de madera de arco gótico. Representa tres momentos fundamentales de la relación entre madre e hijo, en un orden cronológico que va de izquierda a derecha, con un profundo equilibrio cromático en el que predominan el azul, el rojo y el blanco, como podrás advertir fácilmente.
La primera tabla representa la Sagrada Familia. El vestido de la joven María es azul y blanco, para subrayar su virginidad. José es ya un anciano y se apoya sobre un bastón. Observa el cuidado por los detalles, la perfección en la representación del cristal de las ventanas, o el tapiz. Si te fijas en las esculturas dibujadas como decoración a lo largo del arco del marco, verás que representan momentos de la juventud de Jesús.
En la segunda tabla, se representa el momento más doloroso para María: una madre que se ve obligada a sostener el cuerpo inerte de su hijo. Aquí, la Virgen viste de rojo, para remarcar el dolor y la santidad.
Los dos hombres son San Pedro, el fundador de la Iglesia, y Lucas, el evangelista patrón de los artistas. Las esculturas a lo largo del arco representan la pasión de Cristo.
La tercera tabla representa el momento en el que Cristo revela a la Virgen que ha resucitado. María lleva un vestido azul oscuro, mientras que el de Cristo es rojo, el color divino.
Si miras con atención, observarás algo extraño al fondo: se puede ver de nuevo a Jesús, que acaba de salir del sepulcro y se dirige hacia la Virgen. La representación de dos sucesos acontecidos en momentos distintos en una misma imagen demuestra que, en aquella época, un cuadro no pretendía representar la realidad como si fuera una fotografía, a pesar del cuidado por los detalles, sino contar una historia.
Curiosidad: durante años, se pensó que este cuadro era una copia del original conservado en España. Sin embargo, estudios recientes han demostrado, de forma inequívoca, lo contrario.
Aquí termina nuestra visita a la Gemäldegalerie. MyWoWo te da las gracias y te cita en otra maravilla del mundo.