PLAZA MAYOR, Visita Exterior

La plaza Mayor está rodeada de pórticos, pináculos, áticos, techos de pizarra y, como ves, por un gran número de balcones. No pierdas el tiempo contándolos: son 237. ¿Pero por qué tantos? La razón es histórica: en la época de la monarquía de los Habsburgo, en los siglos XVI y XVII, los balcones se cedían o arrendaban a las autoridades. De hecho, desde estos exclusivos puntos de observación se podía asistir a los diferentes espectáculos que se celebraban en la plaza: fiestas populares, corridas, procesiones, beatificaciones y los dramáticos autos de fe, las ejecuciones con las que finalizaban los procesos de la Santa Inquisición.

Entre los edificios de la plaza Mayor, tu mirada se verá atraída de inmediato por los frescos que decoran la fachada de la llamada "Casa de la Panadería". Este edificio data de finales del siglo XVI, pero ha sido reconstruido varias veces a lo largo de los siglos, y se llama así porque originalmente albergaba, en su planta baja, la tahona pública, una especie de panadería destinada a los pobres. Actualmente, su "Sala de las Columnas" es la sede de la Oficina Central de Turismo de Madrid.

Bajo los pórticos de la plaza Mayor, además de varios cafés, restaurantes y locales tradicionales, los domingos por la mañana se organiza un pintoresco y renombrado mercadillo filatélico y numismático, mientras que en diciembre, el espléndido recinto está ocupado por el clásico mercadillo de Navidad, donde se vende de todo: desde abetos a pesebres, pasando por musgo para las decoraciones, máscaras o pelucas....