VILLA JULIA, Museo
Después de hablarte del edificio te contaré ahora algunas cosas sobre su contenido, es decir, el museo. Se fundó a finales del siglo XIX y está dedicado a las otras civilizaciones itálicas existentes en tiempos de los romanos, especialmente la fascinante cultura etrusca; además, el museo se amplía continuamente, gracias a los nuevos hallazgos, pero también a la recuperación de materiales arqueológicos exportados ilegalmente o robados.
Como sabrás, los etruscos dieron origen a la civilización más importante de la península Itálica anterior a la romana. Llegaron desde el sudeste de Europa en torno al año 900 antes de Cristo y se distribuyeron por el centro de Italia. Sus principales centros urbanos, de los cuales procede la mayor parte de las piezas que verás en el museo, eran ciudades de la Toscana y el Lacio que todavía hoy subsisten, como Arezzo, Volterra, Chiusi, Cerveteri y Tarquinia, cada una con sus propias influencias, características y costumbres.
Casi todo lo que sabemos de la civilización etrusca, como obras de arte, inscripciones y construcciones, está relacionado con los hallazgos provenientes de sus estructuras funerarias: es decir, las necrópolis, los antiguos cementerios. Los etruscos daban una gran importancia a los ritos y las tumbas, en las que también se depositaban los tesoros de las familias. Ten en cuenta que un rasgo típicamente etrusco es la presencia de retratos realistas en las urnas y sarcófagos: este gusto por la reproducción fiel de las facciones y expresiones es el mismo que puedes encontrar en el arte romano. No obstante, para el conocimiento de la vida cotidiana de la época, las necrópolis etruscas son para nosotros una auténtica mina: en ellas se encuentran refinados objetos de bronce de uso doméstico, muebles, asientos, braseros, espejos y otros efectos personales. Por ejemplo, en el museo verás recipientes de forma ovalada, que servían para guardar ropas, joyas o accesorios de tocador, decorados con grabados y equipados con cuatro patas de apoyo y tapas con pequeñas figuras que funcionaban como asas.
Además de desarrollar formas artísticas y decorativas originales, los etruscos se mostraron también muy abiertos a las otras grandes culturas del Mediterráneo: como verás aquí en el museo, en sus tumbas se han encontrado importantes ajuares de loza griega, entre ellas algunas obras maestras absolutas de la cerámica pintada, así como objetos egipcios, cartagineses y de Oriente Medio.
CURIOSIDAD: muchas de nuestras comidas fueron inventadas por los etruscos. Por ejemplo, preparaban una pasta aderezada con diversos elementos y cocida al horno que podemos definir como el antepasado de la pizza. También salaban y secaban la pata del cerdo, obteniendo algo muy similar a nuestro jamón.