CÀ D'ORO, Galería Franchetti - Segunda Planta
La segunda planta de la Ca' d'Oro pierde en parte el carácter de colección privada, correspondiente principalmente al siglo XV, y te ofrece diferentes obras por épocas, materiales y autores. En resumen, es un poco menos "casa" y un poco más "museo", ¡pero menudo museo!
Entras a una sala de espera principesca, dedicada al siglo XVI, siglo de oro del arte veneciano. Entre tapices flamencos y bellísimos bustos-retrato, prepárate para ver algunas obras maestras de la pintura de tema no religioso: la Venus del espejo de Tiziano (copia hecha por él mismo de su famoso cuadro), la Venus en el paisaje de Paris Bordon, natural de Treviso, un retrato de Tintoretto y otro, posterior y evidentemente inspirado en la pintura veneciana, del maestro de Amberes Anton Van Dyck.
Otras importantes obras extranjeras, de los siglos XV y XVI, se encuentran en la siguiente sala: su pieza central es una emocionante Crucifixión, obra de un maestro flamenco.
En la colección de cerámicas venecianas verás obras pequeñas y muy hermosas, y también podrás descubrir los diseños que Gianlorenzo Bernini hizo para la Fuente de los Ríos de la plaza Navona de Roma, y dos encantadoras vistas de Venecia de Francesco Guardi.
Pero la Galería Franchetti te tiene preparadas otras fantásticas sorpresas. En una gran sala con vistas al Gran Canal tienes la inusual oportunidad de contemplar importantes fragmentos de frescos de principios del siglo XVI. Aquí verás trozos de las escenas pintadas para el claustro de San Esteban y fragmentos de la decoración exterior de la Fondaco dei Tedeschi. Aunque corroídos por el salitre, estos escasos restos casi ilegibles tienen una importancia fundamental para la pintura veneciana del siglo XVI. Quedan partes de la Joven desnuda, pintada con delicadeza por Giorgione, y sobre todo la imagen de la Justicia que empuña la espada con un pie sobre una cabeza decapitada, pintada por un joven Tiziano, aquí en los inicios de su extraordinaria carrera.
CURIOSIDAD: debes saber que durante la restauración del palacio, el barón Franchetti trabajaba personalmente todos los días en el suelo de mosaicos de la planta baja, que quería que fuera similar al de la basílica de San Marcos. El escritor y poeta Gabriele D'Annunzio, que era su amigo, cuenta que también él se vio obligado a participar varias veces en este trabajo.
Termina aquí nuestra visita a la Ca' d'Oro: MyWoWo te da las gracias y ¡te cita en otra maravilla del mundo!