FUNDACIÓ JOAN MIRÓ, Colección
La mayor colección de pinturas, esculturas y dibujos de Miró es una oportunidad única para descubrir su mundo artístico, pero ten en cuenta que, lamentablemente, sólo se exhibe una parte de este enorme archivo.
La colección permanente sigue un sencillo recorrido cronológico, dividido en ocho secciones; tu visita comienza con un enorme tapiz, que fue realizado en el 79 precisamente para la Fundación. Después de la Fuente de Mercurio, que como te decía tiene mercurio en lugar de agua, llegas a un amplio espacio abierto donde puedes admirar la Mujer, una escultura de bronce que consiste en un huevo en equilibrio sobre una cajita de madera con un extraño agujero en el centro.
La Sala Joan Prat lleva el nombre de un coleccionista amigo de Miró, y alberga una selección de obras desde sus inicios hasta los años veinte. Te recomiendo los paisajes, de bellos y soleados colores mediterráneos, y un precioso retrato de 1919 en el que una chica de ojos felinos te mira de modo hipnótico.
A medida que avanzas por el recorrido, te das cuenta de cómo Miró se aleja cada vez más del estilo figurativo de sus primeros años y se dirige hacia el mundo onírico del surrealismo. Mira por ejemplo El guante blanco, con esa mano de dedos deformes que fluctúa en un cielo azul.
En los años 30, la fantasía de Miró tuvo que hacer frente a la realidad. En Hombre y mujer frente a un montón de excrementos puedes advertir toda su sensación de angustia e impotencia por la situación política de España.
Las obras posteriores al 45, expuestas en un pasillo, vuelven a llenarse de armonía y ganas de vivir, después de la tragedia de la Segunda Guerra Mundial.
Los trabajos de los años 60 y 70 los puedes encontrar en una sala con forma de "L", y puedes ver cómo incluso a la vejez el lenguaje expresivo del artista no deja de evolucionar.
La colección permanente se cierra con una selección de fotografías del artista.
CURIOSIDAD: Miró llegó a odiar la pintura convencional hasta el punto de que en numerosos escritos y entrevistas expresó su deseo de "violarla" y "asesinarla", para alcanzar nuevos medios de expresión.
Termina aquí tu visita a la Fundació Joan Miró. MyWoWo te da las gracias y ¡te cita en otra maravilla del mundo!