SANTA MARIA MAGGIORE, Exterior
Hola, soy Dani, tu guía personal, y junto a MyWoWo te damos la bienvenida a una de las maravillas del mundo: la Basílica de Santa Maria Maggiore.
La magnífica Basílica de Santa Maria Maggiore se encuentra en una zona donde ya en época romana había algunos edificios públicos y probablemente algunas termas. El espacio que hoy ocupa la iglesia ha sufrido diversos cambios a lo largo de la historia, a partir del siglo V. De hecho, la construcción de esta basílica es solo la última fase de una intensa actividad constructiva que llevó a la edificación de una iglesia paleocristiana, posteriormente sustituida por un edificio románico y, por último, por una estructura gótica.
El edificio actual data de 1524 y se terminó en solo cuatro años. Fue construido por orden de Bernardo Clesio, el entonces jefe del Principado Episcopal de Trento y artífice de un ambicioso proyecto de modernización de la ciudad, según los principios del Renacimiento. El proyecto fue confiado al arquitecto de Como, Antonio Medaglia, quien se inspiró en la basílica de San Andrés en Mantua.
Al observar la fachada y sus líneas clásicas, no es difícil imaginar las intenciones del obispo Clesio, que con la construcción de esta iglesia pretendía introducir un nuevo lenguaje arquitectónico en Trento que rompiera con la tradición medieval con la que la arquitectura urbana había quedado firmemente vinculada.
El delicado efecto en dos colores que anima el exterior del edificio, construido en piedra blanca y roja, se intensifica en la fachada, dividida en tres partes que reflejan la organización del espacio interior. La majestuosidad de los pilares que se pueden ver en la pared exterior, encuentra la continuación ideal en el frontón, el espacio triangular que cierra el edificio en su parte superior, y en el gran arco de medio punto que hay sobre la puerta de entrada y que mandó construir el príncipe-obispo Cristoforo Madruzzo en 1539. En el espacio que hay sobre el portal puedes ver una representación de la anunciación a María.
En el lateral izquierdo del edificio puedes contemplar el campanario de piedra caliza blanca, coronado por una cúpula, que con sus 53 metros de altura, es el más alto de la ciudad.
Curiosidad: a solo unos metros de distancia de la torre del campanario, verás una columna. Es un monumento conmemorativo que se construyó en 1845 en memoria del estrecho vínculo entre esta iglesia y el Concilio de Trento.